
Jorge Icaza

(Quito, 1906 - 1978) Escritor y novelista ecuatoriano, máximo representante junto con Alcides Arguedas y Ciro Alegría del ciclo de la narrativa indigenista del siglo XX. Su infancia transcurrió en el latifundio de su tío, Allí fue donde se dio cuenta de la dura realidad social que se vivía en el país, la cual marcaron sus obras.
los indígenas fue la realidad social que más le marcó. Al vivir en la hacienda de su tío, se dio cuenta del maltrato que sufrían los indígenas por parte de sus patrones. donde entró en contacto con la realidad social ecuatoriana que marcó toda su obra.
Su fama se debe a su obra narrativa, que comenzó con el libro de cuentos Barro de la Sierra (1933), en la que ya se hace patente el tema que atravesó todos sus escritos: la situación del indio ecuatoriano.
En 1935 ganó el Premio Nacional de Literatura en su país, con la novela En las calles (1935).
Jorge Icaza forma parte de la generación del 30. Ya que este grupo literario se crea justo cuando se diferencian las ideologías en el Ecuador como el socialismo y otras que critican la sociedad, el los autores que conforman el grupo empiezan a escribir obras en las que se demuestra la crítica hacia la sociedad, al igual que las injusticias y miserias de la misma. La generación del 30 está conformada por: José de la Cuadra, Demetrio Aguilera Malta, Enrique Gil Gilbert, Joaquín Gallegos Lara, Alfredo Pareja Diezcanseco, Jorge Icaza y Ángel Felicísimo Rojas. Este grupo de autores realista perdura hasta los años 60 .
Probablemente la cúspide de su elaboración artística la consiguió Icaza en la obra Cholos, que enfoca la transformación del cholo en burgués. El 26 de mayo de 1978 muere Jorge Icaza en quito debido a un cáncer.
Obras: En 1928 publica El Intruso. En 1933 publica la primera edición de los cuentos Barro de la Sierra, y en 1934 sale la primera edición de Huasipungo Otras obras destacadas son Huairapamuscas (Los hijos del viento, 1947); Seis veces la muerte (1953), El chulla Romero y Flores (1958), Viejos cuentos (1960) y la trilogía Atrapados (1972).
Icaza es una figura sobresaliente del indigenismo en la narrativa ecuatoriana: en su primera novela, Huasipungo (1934), Huasipungo es una palabra de origen quichua, cuya traducción es aproximadamente "lote de terreno", aunque su connotación subyacente implica el hecho de la hacienda parcelada con propósitos premeditados, en función de los intereses de su propietario.
Expone la degradada situación en que se encuentran los indios, sometidos a esclavitud por los patronos que cuentan con el apoyo de la autoridad civil y eclesiástica; este libro, de valiente denuncia social y crudo realismo (constantes de la narrativa de Icaza), se ha convertido en una obra fundamental en la evolución de la corriente indigenista del Ecuador.